A través de su cuenta Twitter, el titular de la fiscalía, Pedro Chávarry Vallejos, anunció al país que el día de mañana, en la sesión de la Junta de Fiscales Supremos convocada previamente, oficializará la decisión de renunciar al cargo de fiscal de la Nación.
La crisis del Ministerio Público, que orilló con la frustrada remoción de los fiscales Vela Barba y Domingo Pérez del caso Lava Jato, lo obligó a dar un paso al costado.
Desde aquel 31 de diciembre de 2018, cuando a solo cuatro horas del Año Nuevo se presentara en conferencia de prensa para comunicar el cambio de rumbo del Equipo Especial a cargo del caso Odebrecht, su gestión no tuvo tregua. Inmediatamente un sector de la población se levantó y salió a las calles, y los sectores políticos que antaño lo apoyaban, le dieron la espalda –léase Fuerza Popular y el Apra–. El último golpe vendría de donde menos se lo esperaba: el Colegio de Abogados de Lima.
Con su renuncia se cierra un fragoroso capítulo en el sistema de justicia. Ahora corresponde pensar en quien habrá de sucederlo. Es preciso recordar que su renuncia solo atañe al cargo de fiscal de la Nación y no a su condición de fiscal supremo, por lo que podrá participar en la Junta de Fiscales Supremos, que elegirá al nuevo o nueva titular de la institución fiscal.
Si se tomara en consideración el criterio de antigüedad, el cargo volvería a manos Pablo Sánchez. La siguiente opción es la fiscal Zoraida Avalos. Los otros dos fiscales que integran este colegiado de cinco, son los fiscales Tomás Gálvez Villegas y Víctor Rodríguez. Como ven, mucho poder en pocas manos.
COMUNICADO
En aras de la autonomía del Ministerio Público y a fin de evitar que otros entes también autónomos se vean igualmente vulnerados inconstitucionalmente; como demócrata con una trayectoria limpia e impecable en la impartición de justicia; y si soy pretexto para que continúen estos actos ilegales contra la institución a la que represento como Fiscal de la Nación:
Estoy convocando a Junta de Fiscales Supremos para el día 8 de enero del 2019 como fecha en la que; por respeto a mi institución, el amor a Dios y a mi familia, presentaré mi carta de renuncia al cargo de Fiscal de la Nación.
¡Viva la Autonomía del Ministerio Público!
¡Viva la Democracia!
¡Viva el Perú!
Lima, 7 de enero del 2019
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