Comillas muestra su "adhesión inquebrantable" al Papa Francisco

JULIO L. MARTÍNEZ SJ. PIDE A OSORO QUE LE TRANSMITA EL "APOYO Y ESTIMA" DE LA UNIVERSIDAD

"Algunos que se benefician de estructuras de poder antievangélico le han declarado la guerra"

Julio L. Martínez sj. pide a Osoro que le transmita el "apoyo y estima" de la Universidad

(Jesús Bastante).- La Universidad Pontificia Comillas ha mostrado, públicamente, su "adhesión inquebrantable" al Papa Francisco, ante el ataque programado y sistemático contra él por parte de lobbies ultraconservadores.

Así lo ha proclamado su rector, Julio L. Martínez, sj., durante el acto solemne de inicio de curso, ante la atenta mirada del cardenal de Madrid, Carlos Osoro. Así, el máximo responsable de la Universidad de la Compañía de Jesús ha pedido al purpurado que "traslade al Papa Francisco" la total sintonía y apoyo a su figura y su misión.

"El modo misericordioso de proceder de Jesús, al que nos remite continuamente en todo lo que dice y hace el papa Francisco y que está haciendo que algunos que se benefician de estructuras de poder antievangélico le hayan declarado la guerra", denunció el rector.

"También hace que nosotros le renovemos nuestro indefectible apoyo y estima. D. Carlos, transmítale, por favor, nuestra adhesión inquebrantable al sucesor de Pedro. Que sepa que cuenta con Comillas", añadió. Osoro, según ha sabido RD, se comprometió a ello.

Junto a Osoro y Martínez, Antonio José España, SJ, provincial de España de la Compañía de Jesús y vice-gran canciller de la universidad. En su discurso, el rector apostó por el necesario apoyo para fomentar que los jóvenes estudiantes, sin distinción de género, cursen carreras STEM, y destacó la capacidad de la Universidad para innovar y construir. "No podemos pararnos. Parar es retroceder. Necesitamos avanzar sin pausa".

"La Vida sin examen no merece ser vivida", constató el rector de Comillas, quien evocó el reciente congreso de Universidades Jesuitas, celebrado en Deusto en julio, y reivindicó la enseñanza siguiendo el espíritu ignaciano. "Los universitarios debemos hacer todo lo posible para que el infortunio y la sinrazón no se adueñen de nuestras sociedades", añadió.

Para el rector, "la ética no es un mero catálogo de principios que luego se materializan en normas de comportamiento; por eso ha de incorporar la cordialidad y la sensibilidad en la comprensión de la razón, porque las personas necesitamos argumentar, pero también estimar valores, ser amadas y compadecer".