Un reparto del país a cambio de apoyo a la dictadura

Sin duda que revisar la situación económica del país es un tema obligatorio. Todos los asuntos y todas las crisis impactan en la economía de un país, en la economía del hogar, en la economía de las familias. Y la crisis política que Honduras está viviendo sin duda que golpea fuertemente la economía. Aunque es un conflicto político, lo político es fundamental para el progreso económico de una nación. Los que más pierden son los hondureños y hondureñas que les toca rebuscarse el pan día a día, y los que más ganan son los que se imponen por medio del poder del dinero y el chantaje político. La apuesta por la dictadura en Honduras pasa por la repartición misma de las riquezas que tenemos como país. Y ese apoyo ciego que los sectores empresariales y algunos gobiernos están dando al régimen de Juan Orlando Hernández, tendrá su recompensa. No hay cena gratis dice un viejo refrán. Y estos sectores pudientes están sumamente interesados en acaparar la riqueza de Honduras. Detrás de esta dictadura están en juego los ríos, los bosques, la montaña y la tierra misma, los bienes comunes que les pertenecen a todos los hondureños y hondureñas. Pues esos bienes comunes son utilizados como botín de guerra. Una repartición a cambio de apoyo a la ambición de poder de algunos políticos que se han emborrachado con las mieles que se desprenden del poder y que no están dispuestos a abandonar. En Honduras los que más pagan impuestos son los pobres y los más olvidados, los que nunca o muy poco se benefician, son los pobres. Y los grandes ganadores son los mismos que evaden el fisco y roban al Estado, son los empresarios, los millonarios y los ricos de este país que entre más tienen más quieren. Es así como éste gobierno, desesperado con esta crisis provocada por ellos mismo, tiene que comprar gobernabilidad con el fin de tener un mínimo de reconocimiento internacional. Los sectores empresariales, las élites económicas y las empresas transnacionales, muchas de capital gringo, las que están buscando sacar su mejor tajada de esta crisis política que vive Honduras. Esos son los verdaderos saqueadores de la nación que cuentan con el aval y el apoyo indiscutible de la clase política gobernante.

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